Comité promotor Internacional Antifascista instala mesas de trabajo «por un nuevo mundo»
Fecha: 27-11-2024.
Daniella Blanco.
Daniella Blanco.
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El comité promotor de la Internacional Antifascista ¡Por un nuevo mundo! se instaló este miércoles en el Centro de Convenciones Parque Simón Bolívar en Caracas, con la presencia de al menos 400 delegados internacionales provenientes de diversos países.
El evento estuvo liderado por el canciller de la República, Yván Gil, y el representante de los asuntos internos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Rander Peña. Este equipo promotor tendrá el objetivo de concretar y asignar tareas que se generaron en el pasado Congreso Mundial contra el Fascismo, celebrado en septiembre.
Los delegados estarán intercambiando ideas durante dos días en las siete mesas de trabajo que se instalaron en el Centro de Convenciones.
El filósofo y analista político argentino, Rocco Carbone, afirmó en la instalación del comité promotor de Internacional Antifascista. ¡Por un nuevo mundo! que es una oportunidad para «reencontrarnos con nuestras ideas de la emancipación, la idea de la revolución. Hoy estamos acá para convertirnos en militantes antifascistas latinoamericanos de pueblos unidos del mundo».
Carbone, durante su intervención, definió el capitalismo como un poder mafioso que sirve al fascismo, que es expresado «como un poder de destrucción tanática absoluta y como un poder inherente a la condición humana, y mucho más antiguo como una latencia presente permanentemente en la historia de los pueblos y que, si es estimulada, puede volver a magnificarse».
Explicó que esta expresión de fascismo se ha intensificado en Argentina, llamándose a sí misma libertad: «Ningún poder fascista del siglo XXI se presenta frente al escrutinio público o la consideración pública», con esa palabra como bandera, sino que «recupera antiguas palabras y virtudes de los campos de la emancipación popular y nacional y se presentan con nuevas formas, pero la operatividad política es siempre la misma».
«Entendiéndolo como un dispositivo de aniquilación masiva que impone a nosotros para que lo aniquilemos y mientras tanto habla de humanismo, de una humanidad posible, y ella puede existir simplemente para que lo exterminemos», aseveró.
Asimismo, destacó que «las redes sociales son aparatos de propagación masiva de las fuerzas políticas que bien decimos en llamar fascismo, entendiéndolas como una herramienta para asegurar y perpetuar el dominio de la burguesía y aristocracia tecnológica financiera ante una crisis orgánica e histórica del capitalismo».
Por su parte, la primera vicepresidenta de la Asamblea Nacional, diputada Arling Alonso, manifestó la importancia del esfuerzo que hoy reúne a delegados y delegadas del mundo y que hace «ese compromiso impostergable y urgente de trabajar unidos para erradicar el fascismo y sus prácticas neofascistas», que han hecho que los pueblos sufran a través de la historia.
Alonso resaltó que se viene de encuentros importantes donde «hemos identificado el origen de todas estas prácticas y mecanismos que utilizan los imperios del mundo, agrediéndonos, sancionándonos de manera arbitraria y unilateral, para provocar bloqueos económicos, comerciales, pero también hemos padecido en carne propia esos intentos que les ha resultado fallido en nuestros pueblos», que es la eliminación de lo que se trabaja «que son los procesos revolucionarios y libertarios».
«Nuestros pueblos han alzado su voz y han dicho que nuestra soberanía, independencia y autodeterminación y nuestro destino le pertenecen únicamente a nuestros pueblos», dijo. Exaltó que Nicaragua ha dado muestras con mucha firmeza y deja en claro su respaldo firme a la Revolución Bolivariana, a Palestina, rechaza y exige el cese inmediato de todo el genocidio que se comete, así como se solidariza con las causas justas del mundo.
El evento estuvo liderado por el canciller de la República, Yván Gil, y el representante de los asuntos internos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Rander Peña. Este equipo promotor tendrá el objetivo de concretar y asignar tareas que se generaron en el pasado Congreso Mundial contra el Fascismo, celebrado en septiembre.
Los delegados estarán intercambiando ideas durante dos días en las siete mesas de trabajo que se instalaron en el Centro de Convenciones.
El filósofo y analista político argentino, Rocco Carbone, afirmó en la instalación del comité promotor de Internacional Antifascista. ¡Por un nuevo mundo! que es una oportunidad para «reencontrarnos con nuestras ideas de la emancipación, la idea de la revolución. Hoy estamos acá para convertirnos en militantes antifascistas latinoamericanos de pueblos unidos del mundo».
Carbone, durante su intervención, definió el capitalismo como un poder mafioso que sirve al fascismo, que es expresado «como un poder de destrucción tanática absoluta y como un poder inherente a la condición humana, y mucho más antiguo como una latencia presente permanentemente en la historia de los pueblos y que, si es estimulada, puede volver a magnificarse».
Explicó que esta expresión de fascismo se ha intensificado en Argentina, llamándose a sí misma libertad: «Ningún poder fascista del siglo XXI se presenta frente al escrutinio público o la consideración pública», con esa palabra como bandera, sino que «recupera antiguas palabras y virtudes de los campos de la emancipación popular y nacional y se presentan con nuevas formas, pero la operatividad política es siempre la misma».
«Entendiéndolo como un dispositivo de aniquilación masiva que impone a nosotros para que lo aniquilemos y mientras tanto habla de humanismo, de una humanidad posible, y ella puede existir simplemente para que lo exterminemos», aseveró.
Asimismo, destacó que «las redes sociales son aparatos de propagación masiva de las fuerzas políticas que bien decimos en llamar fascismo, entendiéndolas como una herramienta para asegurar y perpetuar el dominio de la burguesía y aristocracia tecnológica financiera ante una crisis orgánica e histórica del capitalismo».
Por su parte, la primera vicepresidenta de la Asamblea Nacional, diputada Arling Alonso, manifestó la importancia del esfuerzo que hoy reúne a delegados y delegadas del mundo y que hace «ese compromiso impostergable y urgente de trabajar unidos para erradicar el fascismo y sus prácticas neofascistas», que han hecho que los pueblos sufran a través de la historia.
Alonso resaltó que se viene de encuentros importantes donde «hemos identificado el origen de todas estas prácticas y mecanismos que utilizan los imperios del mundo, agrediéndonos, sancionándonos de manera arbitraria y unilateral, para provocar bloqueos económicos, comerciales, pero también hemos padecido en carne propia esos intentos que les ha resultado fallido en nuestros pueblos», que es la eliminación de lo que se trabaja «que son los procesos revolucionarios y libertarios».
«Nuestros pueblos han alzado su voz y han dicho que nuestra soberanía, independencia y autodeterminación y nuestro destino le pertenecen únicamente a nuestros pueblos», dijo. Exaltó que Nicaragua ha dado muestras con mucha firmeza y deja en claro su respaldo firme a la Revolución Bolivariana, a Palestina, rechaza y exige el cese inmediato de todo el genocidio que se comete, así como se solidariza con las causas justas del mundo.